MOUSSAKA GRIEGA
Ingredientes
- 2 cebollas
- 4 dientes de ajo
- 1/2 kg de carne de ternera o cordero picada
- 1 kg de berenjenas
- 1/2 l de aceite de oliva
- 2 tomates grandes
- 1 cucharadita de canela molida
- Un poco de menta fresca
- Sal y pimienta al gusto
- 1 pellizco de perejil picado
- 1 chorrito de vino blanco
- 1 trozo de queso feta para adornar
- 1/2 litro de bechamel
- 3 cucharadas de queso rallado
Os presento una de las recetas más famosas de la cocina griega: la musaka o moussaka griega. Este es un plato que solemos asociar a la lasaña italiana, aunque en el fondo no tiene nada que ver, quizás por la silimitud de ir superponiendo capas y la bechamel hasta que nos queda un pastel delicioso de verduras y carne. La que he preparado está hecha con carne de ternera picada y berenjenas pero la receta original griega es con cordero picado. El resto de los ingredientes son berenjenas, tomates, cebollas y un poco de ajo, todo muy mediterráneo y sencillo de conseguir en cualquier mercado. Y para aquellos que quieran hacerla de manera vegetariana sólo tienen que sustituir la carne por más vegetales como unos champiñones, alguna capa de patata cocida o calabacines.
Espero que os guste este grupito de recetas griegas que os estoy preparando estos días. Y os animo a que preparéis alguna.
Espero que os guste este grupito de recetas griegas que os estoy preparando estos días. Y os animo a que preparéis alguna.
Preparación:
- Empezamos con las berenjenas, la parte más importante, que actúan como la placa de pasta para hacer lasaña. Las cortamos en rodajas de unos 6-8 mm de grosor (si las cortáis demasiado finas al final se acaban rompiendo, además luego pierden grosor cuando las freimos). Las ponemos en un recipiente alargado (puede ser el que vamos a utilizar para luego hacer la musaka) y le echamos sal en abundancia. Dejamos reposar unos 40 minutos para que suelten parte de su agua y que no queden tan amargas.
- Pasamos las rodajas por agua fría y las escurrimos muy bien ayudados por papel absorbente. En una sartén echamos aceite de oliva y cuando empieze a calentarse añadimos las berenjenas. Freímos hasta que queden doradas. Pasamos a un plato con papel absorbente para quitarle el aceite sobrante. Es importante que cuando las friamos no haya demasiado aceite en la sartén porque entonces quedaran muy duras y no nos interesa. Apartamos hasta el montaje final.
- Escaldamos los tomates y una vez sin piel los picamos en trozos grandes. Cortamos las 2 cebollas y los dientes de ajo lo más fino posible. Salpimentamos la carne. Apartamos los ingredientes cada uno en un plato.
- En otra cazuela echamos aceite (3 cucharadas llegan) y introducimos las cebollas y el ajo, lo pochamos todo muy bien y echamos la carne picada a la cazuela (tal como os comenté arriba sería mejor con cordero, pero yo no lo encontré picado). Añadimos un poco de menta, perejil picado y una cucharada de canela molida. Sofreímos durante 5 minutos a fuego suave, sin dejar de remover. Añadimos el tomate y un chorrito de vino blanco, dejamos que se reduzca todo hasta que nos quede una salsa compacta. Aproximadamente unos 15 minutos.
- Mientras preparamos la bechamel vamos precalentando el horno a unos 180º para que esté caliente cuando metamos la fuente refractaria.
- Para montar la moussaka la cosa es muy sencilla, engrasamos el fondo de la fuente con un poco del aceite sobrante de freir la berenjena y una capa de rodajas de berenjena. Encima una capa de la mezcla con la carne, la siguiente de bechamel y repetimos hasta tener 2 pisos. Finalmente rematamos con bechamel (bastante). Y la última capa de queso rallado para gratinar.
- Introducimos al horno 25 minutos a 180º y 5 minutos con el gratinador puesto para que se dore. Adornamos con un poco de orégano y un trocito de queso feta. En este caso yo lo he presentado en una fuente de barro (la misma que utilizo para las vieiras) pero puede ir directamente al plato.